¿Cómo alargar la vida de tu prenda favorita?

¡Empieza a mimar tus prendas más especiales consiguiendo que se mantengan como nuevas! Toma nota de los 9 consejos de hoy.

 A todos nos ha pasado alguna vez que hemos comprado una camiseta, un jersey o un vestido y, después de pocos lavados, parecía viejo, estaba lleno de bolitas o había perdido su forma original. No hay nada más frustrante que ver cómo estas prendas tan bonitas en las tiendas, pierden su brillo y flexibilidad después de los primeros lavados. A menudo cometemos errores en el lavado de nuestras prendas, causándole daños y reduciendo su ciclo de vida. Además, a lo largo de los últimos años, ha aumentado el número de prendas de composición mixta. La calidad de los tejidos ha disminuido y la mayoría de prendas que utilizamos a diario son más delicadas. Es por esto que, si queremos mantener impecable durante más tiempo nuestra ropa, debemos prestar especial atención al proceso de lavado.

 Aplica estos consejos en tejidos delicados como lana, cachemira y seda, y verás como notas los resultados. ¡Toma nota!:

1. Programas de lavado:

Evita los programas de lavado generales y agresivos, así como el máximo centrifugado. Las lavadoras actuales ofrecen programas adaptados para los distintos tipos de tejidos: sintéticos, mixtos o delicados, e incluso puede haber programas específicos adicionales. Además, lava las prendas del revés y evitarás los efectos negativos de los roces entre prendas (cremalleras, botones, etc.)

2. Carga de la lavadora:

No sobrecargues la lavadora, mejorarás la eficacia de lavado. También evitarás fricciones entre los tejidos y la aparición de arrugas excesivas.

3. Manchas:

¿Sabías que las manchas se eliminan más fácilmente en prendas con fibras sintéticas? Sin embargo, dado el cuidado especial que requieren estas prendas, para quitar las manchas más difíciles puede ser de gran ayuda pretratarlas directamente con el detergente líquido especial y dejar actuar durante unos minutos antes del lavado. Si conoces el origen y composición de la mancha, puedes aplicar tratamientos específicos. ¡No olvides realizar pruebas en zonas poco visibles de las prendas para comprobar que no afecta a las fibras ni a los colores!

4. Temperatura de lavado:

La mayoría de fibras sintéticas no admiten temperaturas muy altas ya que podrían modificar sus características. Por tanto, se recomenda lavar entre 30 y 40 grados. Y recuerda: ¡revisa siempre la etiqueta de lavado de la prenda!

 5. Lavado a mano:

La inmensa mayoría de estas prendas pueden lavarse en la lavadora, siguiendo las recomendaciones anteriores y las que constan en la etiqueta de las prendas. En algunos casos, sobre todo por presencia de fibras delicadas en su composición, puede ser conveniente lavar a mano con un detergente líquido especialista. Utilízalo con abundante agua (fría o templada), sin frotar ni escurrir excesivamente, ya que se generarían arrugas o daños en la superficie del tejido.

6. Detergente de lavado:

Actualmente, muchas prendas pierden con el tiempo su flexibilidad y aspectos originales si se lavan con detergentes inadecuados y en condiciones de lavado inapropiadas. Además, con el uso y el deterioro del lavado, se suelen formar en su superficie esas antiestéticas bolitas y pelusas, que le dan un aspecto envejecido a los tejidos. En función de su composición y de la hilatura, es recomendable utilizar detergentes especialistas delicados.

7. Uso de suavizante:

En general el uso de suavizante es muy recomendable para la mayoría de estas prendas. Si hay fibras naturales (lana, algodón, etc.) el suavizante tendrá un efecto claro al tacto, y en caso de ciertas fibras sintéticas (poliamida, poliéster, acrílico) ayudará a reducir la carga electrostática que estas fibras pueden acumular, y el tacto a la piel será mejor.

8. Secado:

Siempre que sea posible, seca tus prendas mixtas al aire libre y en una zona ventilada, evitando la acción directa y continuada del sol. Si en la composición del tejido hay una proporción elevada de fibras delicadas (lana o seda) conviene además secarlas en posición horizontal, por ejemplo sobre una toalla.

9. Planchado:

Plancha la ropa en la dirección del tejido para evitar deformarla. Y recuerda que es aconsejable planchar siempre estas prendas del revés.